¡Tlaxcala sí existe y el Turitour te lleva a conocerla de la manera más cómoda y amena!

Tlaxcala sí existe, y además puedes llegar de la manera más fácil, divertida y cómoda gracias al Turitour, una iniciativa de la Secretaría de Turismo de ese estado de la mano con MOBILITY ADO para impulsar el turismo no masivo hacia las increíbles zonas turística tlaxcaltecas.

Por comodidad d, los camiones parten de la céntrica Avenida Reforma en distintos puntos como el Auditorio Nacional, Ángel de la Independencia, Reforma 222, Hemiciclo a Juárez y Zócalo para posteriormente partir hacia Tlaxcala. 

El recorrido es de los más ameno, pues se viaja con un guía de turismo certificado que cuenta historias y leyendas de los puntos más sobresalientes del recorrido.

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El corazón de la Ciudad de México

Lo primero es abandonar la ciudad de México pasando por su hermoso Centro Histórico, el cual desde 1987 está protegido por la UNESCO. Observa con detenimiento algunos de los más de mil 500 edificios históricos que lo conforman.

Cuando pases por la calle de Donceles no olvides mirar del lado izquierdo, ahí está la que fuera la casa de los Condes de Heras, sitio que alberga el original ángel de la Independencia, el cual se cayó en 1957 debido a un poderosos temblor. Triste enterarse de que el que ves cada día en la Ciudad de México es una réplica ¿no?

También verás uno de los recintos ceremoniales más importantes de los mexicas o aztecas, el Templo Mayor.

Luego el camión se dirigirá a la parte oriente de la ciudad (podrás ver Lecumberri o el Palacio Negro, una de las prisiones más seguras en su momento) para pasar por XXX hasta llegar a la capital tlaxcalteca: Tlaxcala de Xicoténcatl.

Xicoténcatl fue uno de los grandes guerreros de la época precolombina que al principio combatió contra los españoles, pero luego se uniría a ellos.

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El tour te llevará por el Palacio de Gobierno, el cual tiene unos murales increíbles, los cuales fueron pintados por Desiderio Hernández Xochitiotzin el gran pintor de la historia de Tlaxcala.

Son 400 metros cuadrados de murales con un colorido increíble.

Curiosamente, en el Zócalo no se hayan los dos poderes como en otros lados. Aquí el religioso se haya en otro lugar.

Del Palacio de Gobierno el guía te llevará a la majestuosa Plaza de Toros El ‘ranchero’ Aguilar, construida sobre un cementerio y considerada la más antigua del continente, pues sigue dando funciones para 2,500 personas.

Por supuesto no puede faltar una parada en la Catedral. Este inmueble religioso es parte del Conjunto Conventual Franciscano de Nuestra Señora de la Asunción de Tlaxcala.

 Este Conjunto Conventual está inscrito en la Lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO. Estos monumentos son representativos del modelo arquitectónico adoptado por los primeros misioneros –franciscanos, dominicos y agustinos– que evangelizaron a las poblaciones indígenas en el siglo XVI.

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Observa bien la Catedral, pues cuenta con detalles inusuales en México: un techo de dos aguas y carece de cúpulas, consta de una sola nave y su única torre está separada de la iglesia.

Además, pone de relieve la alta calidad de los maestros indígenas que participaron en su construcción.

En la parte interior el techo ostenta un artesonado de madera, estilo mudéjar, catalogado como el más importante de México, con un valor artístico incalculable.

Basílica de Ocotlán, un tesoro arquitectónico

Otra parada es en la Basílica de Ocotlán, un inmueble de una belleza inaudita.

Según la leyenda el origen del culto a la virgen de Ocotlán se remonta a 1541.

Ese año la virgen se le apareció a un indio llamado Juan Diego Bernardino, además de que hizo brotar un manantial de aguas curativas con las que se eliminó la peste que azotaba a los pobladores de Tlaxcala.

La virgen le manifestó a Juan Diego Bernardino que encontraría una imagen suya en un ocote y que deseaba que fuera colocada en una capilla que había en la loma, donde se le rindió culto hasta que se comenzó a construir el actual templo en 1670.

Los trayectos son muy cortos y muy amenos, pues el guía de turistas ofrece datos históricos, así como leyendas. Eso sí, al regreso del paseo, cuando ya todo mundo viene cansado, muy prudentemente guarda silencio por si alguien desea descansar.

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Dispulque… ¿Qué va a tomar?

Estos tours de ida y vuelta en un día también permiten conocer la gastronomía local. En esta ocasión hicimos una parada en la Pulquería La tía Yola.

En ese recinto no solo se toman pulques y curados, también se degustan platillos tradicionales. Diviértete leyendo las curiosas frases alusivas a esta bebida de los dioses que están plasmadas en las paredes… ¡Atáscate Matías, que de esto no hay todos los días!

Y para finalizar el recorrido nada como uno de los lugares que más ha captado la atención de los mexicanos en los últimos meses.

El boom llamado Val’Quirico 

Sobre los vestigios de la ex hacienda de Santa Águeda se erige un pintoresco pueblo con rostro europeo que raya en lo excepcional, pues en seis hectáreas y a solo siete años de su creación presume que tiene más visitantes que varios estados del país en conjunto.

Ubicado en un punto estratégico, —la frontera entre Tlaxcala y Puebla— lo que antes fue un espacio dedicado a la agricultura ahora es el símil de dos ciudades europeas: San Quírico, Italia y Pedraza, Segovia.

Aunque nació en 2013 como un complejo habitacional al poco tiempo se decidió darle un giro turístico. En septiembre de 2015 abrió sus puertas al público con unos cuantos comercios y cinco restaurantes.

Ahora, siete años después, ofrece unas 2,000 sillas entre bares, cafeterías y restaurantes.

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El alimento que incluye el boleto se realiza en el restaurante Casa Taurina, el cual ofrece un menú estándar. Luego de la comida hay tiempo libre para recorrer Val’Quirico de cabo a rabo. Sin duda un broche de oro para este viaje de unas ocho horas de duración.

Detalles

El boleto tiene un costo de 799 pesos para adultos y 720 pesos para niños y adultos mayores con credencial INAPAM.

El pago incluye transporte panorámico ida y vuelta, guía certificado, alimentos (1), degustación de pulque y seguro de viajero. Recuerda llevar algo extra por si se te antoja algo típico o quieres comprar alguna artesanía. 

El Turitour Tlaxcala parte todos los sábados y se anunció que sería la primera ruta de las cinco que se tienen pensadas para recorrer el estado.

Esta iniciativa no es nueva. El Turibus también ofrece experiencias para conocer Teotihuacán, la Ruta del Vino y Queso en Querétaro, Xochimilco, Coyoacán y Estadio Azteca, las Grutas de Tolantongo y Cholula.

En su página o en los diversos puntos de paradas en la ciudad puedes preguntar sobre la que más te interese.

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