Si deseas escapar por un tiempo de la rutina de la capital y disfrutar de actividades interesantes, Apizaco, en Tlaxcala, es la opción perfecta.
Ubicado a poca distancia de la CDMX, este lugar te sumergirá en la auténtica experiencia del México tradicional.
Aquí podrás alejarte de las multitudes y sumergirte en el encanto de sus más bellos atractivos y actividades que te esperan para disfrutar al máximo.
Guía básica de Tlaxcala: Historia, turismo, tradiciones y más
Adéntrate en el centro de Apizaco en Tlaxcala, y sumérgete en el corazón ferrocarrilero y en los hermosos atractivos de esta región.
Comienza tu recorrido descubriendo “la maquinita”, símbolo icónico de la ciudad y emblema de su origen en 1857, cuando se convirtió en el principal centro de ferrocarriles de esa época.
Esta distinción se debe a que inicialmente se construyó la estación desde la cual partían los trenes que conectaban la capital del país, con los primeros viajes para visitar Puebla.
A lo largo de esta estación, una ciudad de calles con una simetría perfecta comenzó a desarrollarse.
Durante la Revolución Mexicana, la ciudad experimentó su época dorada gracias a su papel fundamental en esta importante fase histórica del país.
En este lugar cultural de Tlaxcala, descubrirás el fascinante pasado ferrocarrilero de esta región.
Este edificio, construido en 1916, fue una de las sedes más destacadas de los trabajadores de Ferrocarriles Nacionales de México.
Con 12 salas de exhibición, tendrás la oportunidad de admirar documentos, objetos y planos que se remontan a la fundación de la ciudad.
Además, el museo se encuentra junto a la estación de tren, que complementará tu visita al permitirte apreciar su arquitectura original y otras construcciones de interés.
La Cometa, el campo de dalias que viste a Huamantla
Con un estilo neogótico inspirado en las catedrales alemanas, su construcción data del año 1873, aunque inicialmente quedó sin las torres debido a la escasez de recursos.
Sin embargo, fue en 1950 cuando el famoso actor Mario Moreno Reyes, conocido como Cantinflas, brindó su apoyo para concluir la construcción.
Gracias a su generosa colaboración, la basílica finalmente se culminó en 1960, convirtiéndose en un tesoro arquitectónico de la región.
Este lugar tiene su origen en lo que inicialmente fue un granero, pero posteriormente se convirtió en la Fábrica de Hilados, Tejidos y Estampados San Luis.
El edificio cuenta la historia de la rica tradición artesanal de tejidos que hizo famosa a la comunidad gracias a las vastas haciendas ganaderas de la zona.
En la actualidad, el centro ofrece clases y talleres de artes plásticas, danza y música, además de la posibilidad de recorrer sus galerías, la antigua capilla y las salas.
No puedes irte sin visitar la Monumental Plaza de Toros y degustar los deliciosos tlatloyos, la barbacoa de hoyo o la sopa de nopales, que son parte de las delicias culinarias de Apizaco.
La Cometa, el campo de dalias que viste a Huamantla
Si tú como nosotros eres amante del tequila entonces este festival es un imperdible para…
Mexicano que se respete, ha entonado al calor de una noche de tristeza y despecho…
Si eres fan de Harry Potter no puedes perderte de este concierto sinfónico y el…
Si quieres disfrutar de una pista de hielo en estas fechas decembrinas te recomendamos la…
Visita el santuario de la mariposa monarca en Edomex para observar su migración y contribuir…
Ya son 13 años de que se realiza el festival Sabor Es Morelos y se…
Esta web usa cookies.
Leave a Comment