¿Ya fuiste a Marshmallow Mansion? ¡Sorpréndete con sus experiencias inmersivas!
Este lugar fue creado para probar bebidas deliciosas y experimentar distintas sensaciones a lo largo de un "viaje" por distintos puntos del orbe... ¡el twist ideal para disfrutar el verano!
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Verano, época en la que los días soleados nos llenan de energía y nos invitan a refrescarnos con un coctel helado en alguna terraza, o a olvidarnos del mundo en compañía de buenos amigos en algún sitio que nos regale vivencias significativas.
Para cumplir cualquiera de estos caprichos llegó a México Marshmallow Mansion, un universo audaz creado para volarte la cabeza gracias a una experiencia sensorial de coctelería de clase mundial.
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¡A volar a 30,000 pies!
Esta experiencia inmersiva inicia en una casona ubicada en la calle de Monterrey. Es el punto de partida para un alucinante viaje repleto de colores, olores y sensaciones alucinadísimas.
Como en toda travesía, lo primero es embarcarte. Dirígete a la habitación Airplane, donde, junto con un grupo no mayor a 30 personas, “abordarás” una aeronave que te mantendrá muy entretenido, pues en vez de ventanas cuenta con pantallas que transmiten delirantes imágenes.
Allí podrás degustar el 30’000 feet, que te hará sentir como si en las nubes.
Se trata de una especie de antigintonic liviano y efervescente hecho con ginebra y un exquisito ‘oleo saccharum’, una mezcla de aceite y azúcar; sin duda es lo más adecuado para el encendido de motores.
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Pero no solo eso, pues las bebidas están creadas no solo por la temática de cada “parada”, también fueron pensadas para que el paladar tenga una progresión de sabores… ¡y sin duda la consiguen!
“El del avión es ligeramente amargo, con un toque cítrico que te revela que la segunda parada será Citrus y salino, lo que ocasiona que recibas de mejor forma el dulzor de lo que hallarás a ese bosque cítrico” explica Giovanni Bulnes, el mixólogo detrás de todo este concepto bebible, considerado uno de los mejores bartenders en México.
El bosque cítrico
La primera parada es un alucinante bosque con árboles frutales.
Citrus es un espacio a media luz que despertará a tu niño interior, pues te permitirá columpiarte y hacer hallazgos entre sus ramas.
Y es que cuando “partas” sus limones y naranjas tendrás en tus manos un delicioso bombón con un toquecito de licor y un sabor muy especiado gracias a la adición de pimienta gorda y raíz de Angélica.
Del bosque puedes hacer una breve parada en Gloryhole/tatoo, un rinconcito en donde puedes colocarte un tatuaje removible.
Gloryhole sirve como puente para un cambio total de escenario, pues el siguiente destino es nada más y nada menos que Tokio; allí te esperan sus rascacielos y sus noches de neón, así como una refrescante bebida llamada Taro Kakigori, que entre sus ingredientes se cuentan el taro, vinagre balsámico, tomillo y camote… ¿no se te antoja probarla?
Trago ceremonial en plena jungla
Para seguirte sorprendiendo nada como la entrada a una jungla en penumbra en donde un camino de velas te guía hacia la cabeza de un jaguar que te directamente a los ojos; allí todo es posible, desde sonidos de animales hasta las sillas Acapulco suspendidas del techo.
Una habitación así no podía ofrece cualquier trago, no, tenía que ser algo especial, así que Giovanni, el creador del menú de bebidas del famoso Quintonil, ideó una bebida que te remite a algún rito encabezado por algún chamán.
Shaman juice es una mágica mezcla. “Está a temperatura ambiente y echamos mano de ingredientes ceremoniales como el cacao y el chile y la fruta que te remite siempre a la jungla: maracuyá”, revela Bulnes, mexicano oriundo de Puebla que refinó sus artes por casi una década en Estados Unidos.
Tras ese viaje selvático, oscuro y místico, regresa a la realidad en el área VIP, una terraza decorada con cuadros de felinos, tinas de baño y un caballo tamaño natural que será la delicia de quienes gozan tomándose fotos en posiciones locas.
Ese espacio te permite probar una bebida que ahora se hace con una técnica muy trendy, pero que en realidad se usó en los tiempos de la prohibición del alcohol en Estados Unidos.
La bebida es el resultado de una clarificación con leche. “Se crea un coctel con algún cítrico y se agrega leche que, cuando se corta, hace que las proteínas de la caseína se adhieran a los taninos más fuertes de la bebida; esas proteínas son filtradas, y las pocas que quedan le dan un toque sedoso”, cuenta Giovanni sobre su creación, la cual te deja en el paladar un toque de café delicioso.
Y con ese sabor en los labios es tiempos de decir adiós a esta experiencia creada salida de la cabeza de Diane Micheil, quien desde 2019 fue pensando en este concepto orientado a los adultos que adoradores de la coctelería y las experiencias únicas.
Vive en carne propia las aventuras de Marshmallow Mansion, donde te espera lo inesperado.
Ubicación: Monterrey 129, Col. Roma, entre Chihuahua y Guanajuato, Ciudad de México.
Admisión general: 750 pesos
Admisión VIP: 900
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Agualumbre: 365 días agasajando a Puebla
