Death Stranding 2 el videojuego que plasmó el metro de la CDMX
Death Stranding 2 incluye una estación inspirada en el Metro de CDMX. Kojima lo plasma como símbolo de conexión y resistencia latinoamericana.
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El universo de Death Stranding 2: On the Beach, creado por Hideo Kojima, ha vuelto a sorprender al mundo, pero esta vez con un toque muy local: una recreación casi exacta del Metro de la Ciudad de México forma parte del nuevo escenario jugable. Sí, los jugadores mexicanos podrán ver a Sam Porter Bridges caminar por una estación inspirada en San Lázaro, con escaleras, pasillos, señalética y hasta los característicos letreros naranjas y blancos que identifican al sistema de transporte más grande de América Latina.
El detalle con el que Kojima Productions representó la estación no solo sorprendió a los fans, también emocionó a quienes reconocen cada textura, columna, mapa y rincón del Metro chilango. Aunque hay algunas licencias creativas —como líneas alteradas o anuncios inventados—, el respeto visual y simbólico es evidente. No es solo un escenario más: es una forma de decir “México también está en el mapa del gaming mundial”.
¿Por qué México? Según el propio Kojima, era momento de romper las fronteras geográficas dentro del juego: la ficticia UCA (Unión de Ciudades Americanas) debía expandirse, y nuestro país es ideal para unir realidades, territorios y simbolismos. Además del Metro, Death Stranding 2 incluye otros espacios y misiones ambientadas en México, como estaciones intermedias, construcciones con estética local y nombres en español que dan textura y realismo a esta tierra devastada pero profundamente humana.
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El videojuego también incluye personajes y espacios inspirados en la cultura mexicana. Por ejemplo, se habla de NPCs como “La artista” o “El bokka”, que dan misiones en escenarios desérticos o urbanos dentro de esta nueva narrativa postapocalíptica. Todo está construido con respeto y referencias sutiles, que combinan ciencia ficción con elementos del día a día mexicano.
En un juego donde el mensaje principal es reconectar tras el aislamiento, Kojima eligió un símbolo fuerte: el Metro capitalino. Ese espacio que, en la vida real, une a millones cada día, aquí se convierte en un nodo de supervivencia y memoria. Un gesto simbólico para decir que también desde Latinoamérica se construyen caminos de resistencia y conexión.
Ver al personaje caminar por una estación que bien podría estar en Eje 3 Oriente no es solo fan service, es una validación cultural. Una forma de decir que los lugares que habitamos, los símbolos que nos construyen, también merecen protagonismo en las historias más grandes de la ficción. Y eso emociona, como gamer, como mexicano y como testigo de una industria que por fin nos mira.