¿Te vas a perder Calaverandia? ¡Ya casi se va!
Este festival, en su cuarta edición, ofrece una experiencia única y divertida para visitantes de todas las edades
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La Zona Metropolitana de Guadalajara se llena de eventos que combinan tradición, cultura y fiesta para honrar a nuestros difuntos.
Hay desde festivales gastronómicos, desfiles, recorridos en campos de cempasúchil o en panteones como Mezquitán y de Belén. ¡La oferta es increíble y variadita! Pero sin duda hay un espectáculo que no puedes perderte: Calaverandia.
Este festival, en su cuarta edición, ofrece una experiencia única y divertida para visitantes de todas las edades.
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A lo largo de cinco hectáreas en el Parque Ávila Camacho hallarás impactantes espectáculos multimedia, música en vivo, lo mejor de la gastronomía típica local, instalaciones artísticas, performance, hermosos photo moments e infinidad de sorpresas más.
En cada rincón hallarás escenas increíbles. Desde una ofrenda monumental, un vórtex que desafía tu equilibrio, animatronics de mariposas, cuervos y panteras y trajineras ¡como las de Xochimilco! Y eso es solo para abrir boca.
Además, cuenta con shows que quitan el aliento:
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ALMA es un espectáculo multimedia 4D de alto impacto. Mediante efectos especiales, performers, iluminación robótica y tecnología, se ofrece una hermosa y sencilla explicación del Día de Muertos, la cual cobra vida sobre una pantalla de agua de más de 15 metros de altura.
Monarcas, el alma de los muertos
TUMU, un viaje en alas, es el nuevo show de Calaverandia.
Se trata de un espectáculo multidisciplinario narrado por la gran actriz Ofelia Medina que combina acrobacias, música mexicana y elementos teatrales para contar la leyenda sobre las mariposas monarca.
Cada año, durante los meses de octubre y noviembre, comienza en México el arribo de la mariposa Monarca, que coincide con la celebración del Día de Muertos.
Los purépechas la consideraban “el alma de los muertos”, e interpretaban su llegada como el anuncio de la visita de los difuntos que se producía los días 1 y 2 de noviembre.
El gran altar —con sus 15 metros de altura— es otro punto imperdible, pues es uno de los símbolos más importantes de esta celebración porque es el lazo que une a los vivos con los muertos. Allí cada detalle es un tributo a quienes llenaron nuestras vidas de alegría.
El momento más emotivo de esa atracción es cuando un mariachi en vivo conmina a los asistentes a cantar para recordar a los que ya no están, pero de alguna forma siguen presentes. El espectáculo se acompaña con pirotecnia.
Omi, donde se celebra la infancia
Mientras algunos actos se viven con más solemnidad, hay otros que están marcados por risas y música. Uno de ellos es Omitlán, la casa de Omi, el personaje oficial de Calaverandia.
Allí sentirás que eres una caricatura viviente gracias a la decoración que asemeja casas construidas con huesos, gatos en tejados y un reloj que enloquece cuando jalas una campana… ¡ahí se libera el niño interior, por lo que sentirás que algo te jala hacia la gran resbaladilla Tracsa y la fuente de pelotas!
El inframundo muestra lo que sería un recorrido por los místicos obstáculos que se experimentan cuando se pasa a la otra vida. Allí la energía de tus manos enciende los árboles y las placas que permiten que cruces sano y salvo un río.
También hay un espectáculo circense representado por los siete pecados capitales y decenas de puntos instagrameables como una deslúmbrante Catrina monumental que reposa sobre un lago, un portal de mariposas listo para transportarte al viaje de las almas o un mausoleo que está listo para te tomes decenas de fotos en su místico y mágico interior.
¡Apoya a los artesanos locales!
Y no te contamos más para que descubras por ti mismo cada uno de los detalles que ofrece Calaverandia, que termina su temporada el 19 de noviembre.
No olvides visitar la tienda oficial, donde ofrecen productos de edición limitada y de colección en colaboración con 24 marcas locales, negocios independientes y empresas. ¡Allí se apoya a más de 70 talentosos serigrafistas, costureros, diseñadores, ceramistas y vidrieros!
Para mayor seguridad y comodidad, todas las compras que realices dentro del parque son mediante un sistema cashless.
Primero consigue tu pulsera en bancos fijos o móviles, carga el saldo que desees y usa tu pulsera como monedero. Si al final te sobra, se te regresa.
Pues ya lo sabes, si quieres pasear por el mundo de los muertos y sentir una mezcla de tradición con diversión, visita Calaverandia, todo un viaje lleno de tradición, color y alegría que te llevará al redescubrimiento de la belleza de nuestras festividades.
¡Aquí la tradición se mezcla con la diversión!
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