La Cerería de Jesús: tradición centenaria que ilumina el Centro Histórico

La Cerería de Jesús es uno de los comercios más antiguos que aún sobreviven en el Centro Histórico de la Ciudad de México. 

Fundada a principios del siglo XX, este establecimiento mantiene viva una tradición que comenzó en el siglo XIX en Hidalgo, donde una familia fabricaba velas en un taller doméstico. 

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Con el tiempo, trasladaron su oficio a la capital, estableciendo un negocio que ha resistido más de un siglo.

La Cerería de Jesús se ubica en la calle Venustiano Carranza #122, en la colonia Centro de la alcaldía Cuauhtémoc. En esa misma calle, conocida en el pasado como la “calle de las cererías”, se concentraban varios comercios dedicados a la venta de velas, artículos indispensables tanto para funciones prácticas como religiosas. Hoy, este negocio es uno de los pocos que aún permanecen abiertos, convirtiéndose en un verdadero tesoro cultural.

Un legado artesanal y cultural

En la tienda se pueden encontrar cirios religiosos, velas de cera pura, veladoras y piezas artesanales de distintos tamaños, colores y aromas. Su fama trascendió fronteras y atrajo a personalidades como Dolores Olmedo y el arquitecto Luis Barragán, quienes adquirían velas en este lugar.

La permanencia de la Cerería de Jesús refleja la importancia de las tradiciones en la vida cotidiana de la ciudad. En un contexto donde las tiendas tradicionales han ido desapareciendo, este espacio mantiene encendido el fuego de la memoria cultural.

@wenvenuz 📍 Cerería de Jesús 📌 C. de Venustiano Carranza 122-C, Centro Histórico de la Cdad. de México, Centro, Cuauhtémoc, 06010 Ciudad de México, CDMX. #VelasArtesanales #CDMX #CereríaDeJesús #InsumosParaVelas #HechoAMano ♬ La Catrina – Mahana

Un espacio que resiste el tiempo

El negocio ha sobrevivido más de 100 años gracias a la calidad de sus productos y al valor simbólico que representan. En un mundo cada vez más digitalizado, la tienda recuerda que las velas siguen siendo parte de rituales religiosos, celebraciones familiares y momentos íntimos.

La Cerería de Jesús abre sus puertas diariamente, ofreciendo un ambiente que conecta con la historia y con la esencia de la ciudad. Su permanencia es un recordatorio de que los comercios tradicionales aún tienen un lugar en la vida moderna.

Visitar la Cerería de Jesús es descubrir un espacio único que preserva la tradición artesanal y motiva a seguir explorando la riqueza cultural del Centro Histórico.

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