Pasajeros en salida de emergencia: deberes que pocos conocen
Por normativa, no pueden ocupar estos asientos menores de 15 años, personas con movilidad reducida, o mujeres embarazadas.
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Muchos viajeros eligen los asientos junto a la salida de emergencia por una razón obvia: hay más espacio para estirar las piernas.
Pero lo que pocos consideran es que sentarse ahí también implica una responsabilidad importante en caso de emergencia.
Las aerolíneas ubican estratégicamente a pasajeros que puedan ayudar a evacuar la aeronave si ocurre un incidente. Por eso, si ocupas uno de estos asientos, debes estar dispuesto y ser capaz de actuar rápidamente si la situación lo requiere.
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La primera responsabilidad es leer cuidadosamente la tarjeta de seguridad específica de ese asiento. Ahí se explica cómo abrir la puerta, cuándo hacerlo, y qué señales esperar de la tripulación.
También debes estar preparado para seguir instrucciones del personal de vuelo, mantener la calma y ayudar a otros pasajeros a salir, si es necesario. No todos pueden o deben asumir ese rol, y está bien decirlo.
Por normativa, no pueden ocupar estos asientos menores de 15 años, personas con movilidad reducida, mujeres embarazadas o quienes viajan con bebés o personas dependientes. Tampoco quienes no hablen el idioma de la tripulación o estén bajo efectos de alcohol o medicamentos.
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Otro punto clave es que no puedes tener equipaje de mano en el suelo. Estos pasillos deben mantenerse completamente libres para permitir una salida rápida en caso de emergencia.
Si al abordar te asignan uno de estos asientos y no te sientes cómodo o capacitado, puedes pedir a la tripulación que te reubique sin problema. La seguridad siempre es prioridad.
Así que ya lo sabes: si quieres más espacio para las piernas, asegúrate también de estar listo para asumir un rol activo en la seguridad de todos a bordo.
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